En aquella mañana Chumbi despertó temprano, antes mismo que el sol naciera, pues la ansiedad para llegar a su ciudad natal era muy grande. Estaba ansioso por ver a su familia que ahí habia dejado hacian como 15 ciclos enteros de la naturaleza.
Tomó su mate de coca, comió algunos pocos granos, arregló sus cosas y partió a ver a su familia, a pesar de su ansiedad Chumbi aun tenia que caminar por lo menos hasta el medio día, que en esas alturas era bastante tiempo por el aire enrarecido y por el sol inclemente. Pero no le quedaba otra a Chumbi, sino seguir caminando y concentrado en su destino.
Huachirullo habia sido la ciudad donde había nacido y hasta donde había vivido hasta sus 18 años, solo después tuvo autorización de su padre para irse. En esa ciudad estaban sus primeros recuerdos, sus primeros pasos, sus primeros amores y su vida inocente, se recordaba hasta del olor de las mañanas, del frio de las noches y del delicioso silencio que envolvia su lado más espiritual y que lo hacía volver para verificar la posibilidad de regresar y volver a vivir en esos lados. Mientras caminaba se acordó de cuando jugaba con su hermano menor, de cuando su mamá lo ayudó aponerse los zapatos después que se habia herido el pie derecho y, por último se acordó del primer beso en la mejilla de Loreto, su primera novia.
La última curva del camino estaba muy emocionante y las memorias ya le estaban dejando bastante comovido, cuando al mirar a su pueblo, e imaginarse la felicidad de encontrar más que a su gente a su propria historia, percibe que su pueblo ya no está más ahí, solo se ven piedras y tierra… El silencio le impacta el corazón y la mente, el viento se escucha y afecta los rincones más profundos de su alma. Solo se ven piedras y tierra. ¿qué habrá pasado con su pueblo? ¿Dónde están las personas? ¿Y las plantas y los animalitos que siempre se veian caminando por las pobres calles de su villa?
Se sienta, como que tirando el cuerpo al suelo, sientiendo que todo su esfuerzo habia sido en vano y que tendria que caminar aun más para volver a encontrar a su villa.
– ¿Será que me equivoqué el camino? Piensa en voz baja, asi como su cabeza, también baja.
Después de algunos minutos de angustia y decepción decide volver a la villa anterior y preguntar sobre el destino de la villa. Un día entero de caminata, preocupación y angustia llega a Uspallata, la villa más cercana y debajo de un lindo Sauce, un señor escondiéndose del sol, sentado y mirando al infinito parecia esperarlo para una conversa. Chumbi le pide permiso y el señor lo invita a sentarse y a tomar un vaso de agua.
– Muchas gracias, señor! Pero cuénteme, acabo de volver de Huachirullo ¿podria contarme que pasó con el pueblo que ya no está más ahí? ¿La gente se ha cambiado? ¿Adónde están?
– Huachirullo ya no existe mi amigo. Huachirullo pasó por una de las peores verguenzas que todo el imperio puede haber pasado y ojalá sirva de ejemplo a todos nosotros para que su error nunca más se repita…
– Pero, ¿qué pasó? Pregunta Chumbi.
– Todos nosotros del imperio, siempre supimos que las niñas hermosas o las de linaje noble, menos las hijas directas del rey Inca, eran consideradas las mujeres del Sol y que ellas eran destinadas a vivir en la casa de las escogidas, preservando total recato, total virgindad guardándose al dios Sol, cierto? Chumbi conciente con su cabeza.
– Y también sabíamos que esas mujeres son escogidas antes de sus 8 años para que se tenga certeza de que son son virgenes y que, más importante, sonintocables y que son mujeres especiales, que vinieron a este mundo para servir solamente al Sol y a nadie más, ni mismo el rey las podria tocar, cierto? Chumbi conciente con su cabeza nuevamente.
– También sabíamos que esas mujeres eran especiales y que muchas de ellas morian vírgenes… Lo que pasa hijo, es que un conterraneo suyo no respetó esa ley y se huyó con una escogida… estuvieron por 2 meses juntos entremedio de las montañas hasta que el ejercito del imperador los encontró, y como es la ley, hay enterrar viva a la mujer, ahocar al hombre, matar a toda su familia, a todos sus animalitos y a los animalitos de toda su familia, matar a todos sus vecinos, a todos los animalitos de los vecinos, las plantas, árboles y a todo el pueblo, derrumbar todas las casas hasta que el lugar quedase desierta y desolado, para que nadie más lo encontrase y para que no quedara registro de que había existido el lugar y su gente…
La ley de la protección a las mujeres del Sol en el imperio Inca siempre existió, nunca se aplicó, pero era una ley muy presente en la vida de los habitantes del imperio. Y, además, como las leyes incas eran aplicables y siempre honradas una vez infringidas, se cuenta que, la población masculina del imperio no se atrevia ni a mirar para dentro de las casas de las escogidas.
Según el Inca Garcilaso de la Vega, en su épico “Comentários Reales de los Incas”comenta que “la casa de escogidas en Cuzco, era un barrio que está entre las calles que salen de la Plaza Mayor y van al convento de Santo Domingo…” eso demuestra la cantidad de mujeres que eran las escogidas, que era necesario un barrio todo para abrigarlas y se estima más de mil quinientas…
Me llamo Alvaro Concha, tengo 4 hijos, vivo en Porto União, en el estado de Santa Catarina, una linda ciudad al sur de Brasil.